El gigante asiático no esconde sus intenciones de ampliar su presencia, China quiere su tajada de la Antártida para explotar a sus recursos
Se ha confirmado que China quiere su tajada de la Antártida. Los ricos recursos naturales del llamado “continente de hielo” resultan demasiado atractivos para Beijing.
China es uno de los firmantes del Tratado Antártico, de 1961. Este documento garantiza que el continente seguirá siendo independiente. Pero, ¿qué pudiera pasar en el futuro? Si se rompiera ese acuerdo, en el futuro, China quiere estar bien posicionada.
Los intentos chinos por acercarse a la Antártida comenzaron tardíamente. Países como Chile y Argentina realizaron misiones científicas desde el siglo XIX. Mientras, China solo tuvo su primera expedición en 1983. No obstante, en las últimas cuatro décadas, la economía china ha despegado. Ese poderío económico le ha permitido impulsar sus ambiciones en la Antártida. A día de hoy, China cuenta con cuatro bases en el territorio antártico.
Esas bases están esparcidas por todo el continente. Por ejemplo, “Gran Murall” está en el oeste, en la Península Antártica. “Kunlun” se ubica en el centro, en la meseta antártica. “Zhongshan” se localiza en el este, en la bahía de Prydz. Mientras, “Taishan” está cerca de Prydz. De ellas, la más conocida es “Kunlun”.
Dicha base comenzó a funcionar en 2009. Está ubicada en uno de los puntos de mayor altura de la Antártida. Por tanto, es un lugar privilegiado para realizar estudios astronómicos. Los expertos creen que los chinos utilizan “Kunlun” para aumentar la precisión de BeiDou, su sistema de navegación satelital. Este sistema compite con el GPS estadounidense, el GLONASS ruso y el Galileo europeo.
China solicita una Administración Especial
Desde 2013, China está solicitando que se establezca una Zona Antártica Especialmente Administrada, alrededor de “Kunlun”. Sin embargo, esta iniciativa no ha prosperado. En sus expediciones, los chinos han buscado la ubicación de reservas de gas y petróleo. También se han interesado en recursos mineros como el oro, uranio, cromo y carbón.
El enorme interés de China por la Antártida preocupa a las otras grandes potencias. En 2048, el Tratado Antártico será revisado por todos los firmantes. Si este pacto terminara, China estaría en buena posición para aprovechar los enormes recursos naturales del continente.